El viento, en función de su procedencia y la región en la que se produzca, puede recibir un nombre u otro, y ha sido de gran importancia para la historia y el progreso del ser humano. Por ejemplo para la navegación y el comercio, la existencia de ciertos vientos planetarios ha sido fundamental para que los antiguos barcos de vela pudieran recorrer grandes distancias sin suponer un esfuerzo titánico, lo que favoreció a un gran desarrollo.
Por ello, los vientos más importantes para ciertas regiones, o los más intensos, tienen su propia denominación ¿Quién no ha oído hablar de los vientos Alíseos, el Tramontana, o el Cierzo? Pero los vientos que ocupan el post de hoy, son los dos predominantes en el mar Mediterráneo: el poniente y el levante.
Estos dos tipos de viento son especialmente destacables en la zona cercana al Estrecho de Gibraltar, en la provincia de Cádiz, una parte de la provincia de Huelva y otra de la provincia de Málaga, aunque el levante también afecta de una forma indiscutible en todo el litoral oriental de la Península.
El viento de poniente y de levante en estas zonas no solo afecta a los humanos, sino también a los flujos migratorios de las aves, a la fauna terrestre y marina, y también a la orografía del lugar. Las características playas de arena fina de Cádiz, por ejemplo, en las que podemos encontrar incluso dunas, como ocurre en Punta Paloma o la playa de Bolonia, son creadas en gran parte por la incidencia de estos vientos.
Viento de levante en el Mediterráneo
El Levante es el nombre que denomina al viento que proviene del Este, por donde se “levanta” el Sol. Este viento se puede dar de forma general en todo el Mar Mediterráneo, principalmente en su parte occidental, lo que provoca fuertes vientos a grandes distancias más allá del Estrecho de Gibraltar, o también se puede dar de una forma más local (afectando solo a la región del Estrecho), sobre todo durante los meses de verano.
Cuando el Levante se da de forma general en casi todo el Mediterráneo, es porque hay una diferencia de presión entre un Anticiclón que se forma en las Azores, y una Borrasca en el Norte de África. Esta diferencia de presión provoca un movimiento de las masas de aire en dirección al Estrecho, lo que forma el viento de Levante. Este viento se forma en la parte norte del Mediterráneo occidental, en un punto cercano a las Islas Baleares.
Viento de levante en Cádiz
Como ya hemos comentado, este viento se forma en pleno Mediterráneo, lejos del Estrecho, pero es aquí, en la provincia de Cádiz, donde el viento alcanza su mayor fuerza (al pasar entre dos grandes masas de tierra muy cercanas entre sí). En la zona del Estrecho de Gibraltar el Levante sopla a una velocidad media de unos 50km/hora, con rachas de hasta 100km/hora. Este viento se da con mayor frecuencia en la zona durante los meses comprendidos entre Mayo y Octubre. Cuando el levante sopla fuerte durante varios días seguidos, se les llama levanteras, y pueden llegar a durar hasta 10 días. El levante es el viento predominante en la provincia de Cádiz, y sopla durante más de 150 días al año.
Puede llegar a ser tan fuerte, que ni las aves se atreven a cruzar el Estrecho cuando sopla el levante. Por ejemplo en zonas como Tarifa, cuando sopla el levante durante varios días, se pueden ver miles de milanos en la zona, esperando a que deje de soplar el viento para poder cruzar el Estrecho, ya que de hacerlo con un fuerte levante, podrían acabar en mitad del Atlántico.
El levante en Cádiz tiene un diferente efecto, en función de si estamos en la zona Este del Estrecho, o si nos encontramos al Oeste del mismo. El levante suele traer niebla y precipitaciones en la zona Este del Estrecho, pero por el contrario, en la zona Oeste el viento llega seco y caliente. Esto se produce debido al efecto Foehn, ya que por la geografía del terreno y los cambios de presión que sufre el aire, este pierde su humedad y se calienta. Este fenómeno causa también que se produzcan las conocidas como “barbas del levante”, que son formaciones nubosas que se forman en el Peñón de Gibraltar cuando sopla el Levante.
Tanto las sierras del sur de Andalucía como la cordillera del Atlas en el norte de África bloquean el viento a poca altura, lo que provocaría una canalización del viento hacia las zonas más bajas sobre el agua, dando lugar a vientos más fuertes en las zonas cercanas al Estrecho. El Estrecho de Gibraltar es un embudo natural que se opone a la fuerza del viento, lo que provoca a su vez un aumento en su velocidad y que convierte a la zona de la Estrecho una zona con la que tener cuidado durante la navegación.
No es de extrañar que en la provincia de Cádiz existan más de 73 parques eólicos, que pueden llegar a producir alrededor de 1400 megavatios de energía.
Viento de poniente
El viento antagonista del Levante en el Mediterráneo es el Poniente. Recibe su nombre porque proviene del oeste, por donde se “pone” el Sol. Este viento es bien conocido desde la antigüedad y ha recibido multitud de nombres: favonio, véspero, Provenza, céfiro, étc.
El viento de poniente se produce por la diferencia de presión entre una borrasca en la zona atlántica de la península, y un anticiclón en la zona norte de África. Es un viento frío y húmedo que baja la temperatura, y provoca precipitaciones.
Sin embargo, en España, tenemos que diferenciar entre el Poniente Atlántico (el que se produce en Huelva, Cádiz, Galicia o Asturias), y el Poniente Mediterráneo (el que se produce en la costa del Levante español, en zonas como Valencia, Murcia, Alicante, étc).
El poniente mediterráneo
El poniente Mediterráneo suele tener más incidencia durante los meses estivales. Este viento entra frío y húmedo a la Península, desde la zona atlántica, pero al cruzar la Península y sus obstáculos geográficos, el aire sufre cambios de presión bruscos (efecto Foehn), que hacen que se caliente y que pierda su humedad.
Cuando el viento ha cruzado toda la Península y llega a zonas como Alicante, o como Murcia, este llega totalmente seco y bastante calienta, lo que hace que aumenten las temperaturas (en Murcia se han llegado a registrar 47 grados de temperatura durante el verano).
El poniente atlántico
Por el contrario, el poniente Atlántico es aquel que se produce en las costas occidentales de la Península, en zonas como Cádiz, Huelva o Galicia. El poniente de la zona Atlántica es un viento mucho más moderado, y no es habitual que sobrepase rachas de 50km/hora. La ventaja de este viento que se produce más durante el verano, es que regula la temperatura, haciendo que en días de verano la temperatura no sobrepase los 30º, algo que no es habitual en zonas como Andalucía.
Cuando el poniente sopla durante varios días seguidos en Cádiz, las aguas suelen llenarse de algas que el viento, el fuerte oleaje y las corrientes arrastran desde el Atlántico. El levante es el encargado de limpiar estas algas una vez el poniente deja de soplar.
Otra de las ventajas del poniente Atlántico, es que al ser un viento muy húmedo, arrastra muchas partículas de agua de mal pulverizada, que contiene una gran cantidad de yodo, y que tiene efectos muy positivos sobre la salud.
Además, este viento hace de estas zonas el lugar perfecto para los amantes del viento y de los deportes acuáticos, zonas de Huelva y Cádiz son por ejemplo mundialmente conocidas entre los amantes del kitesurf o el winsurf.
Como todo navegante sabe, el viento puede ser el mayor aliado, o el mayor enemigo que uno puede tener mientras navega, por lo que nunca está de más conocer todo lo que podamos saber sobre los vientos de la zona en la que nos encontremos navegando.
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